Jose Mourinho no dejó pasar la oportunidad de responder a Ole Gunnar Solskjaer después de que el técnico noruego recriminara a Heung Min Son que se tirara en una polémica acción del Tottenham vs United de este domingo.
"Si ese fuese mi hijo y se queda abajo y necesita que sus compañeros lo ayuden a levantarse, no obtiene comida porque eso es vergonzoso", comentó Solskjaer.
La respuesta del portugués no tiene desperdicio: "Con relación a ello, solo quiero decir que Son tiene mucha suerte de que su padre es mejor persona que Ole. Porque como padre, y yo lo soy, siempre tienes que alimentar a tus hijos. No importa lo que hagan".
Además palo a la prensa: "Si yo dijera a algún jugador de otro club: 'si fuera mi hijo no le daría la cena esta noche', o algo por el estilo, ¿cuál sería la reacción al respecto? Es muy triste que ustedes no me hayan preguntado acerca de ello. Es muy triste que ustedes no tengan la moral y la honestidad de tratarme como a los demás".
"Si tienes que robar para alimentar a tus hijos, tú robas. Estoy muy decepcionado. Y como decimos en Portugal, pan es pan, y queso es queso, por lo tanto ya le he dicho a Ole lo que pienso acerca de su comentario", concluyó Mourinho.
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Las cámaras captaron la tensión al reencontrarse los 'viejos enemigos' Mourinho, Pogba y Shaw
Luke Shaw está teniendo una gran temporada con el Manchester United y volvió a rendir a un gran nivel ante el Tottenham este domingo.
Un jugador al que le costó consolidarse en el equipo, sobre todo durante la etapa de Jose Mourinho en el banquillo de los 'red devils'.
Sabiendo que se iban a reencontrar, las cámaras de televisión estuvieron muy pendientes de los gestos de ambos tras el partido.
Mourinho felicitó tanto al lateral inglés como a otro viejo conocido y con quien tuvo sus más y sus menos como Paul Pogba.
Duro palo el 1-3 para los 'spurs' en la pelea por entrar en puestos de Liga de Campeones.
'Mi ídolo': Casemiro se burló del banquillo del Barça tras ser expulsado y la imagen se hizo viral
Casemiro no tuvo un Clásico sencillo. Le tocó trabajar de lo lindo y para colmo fue expulsado al fin después de ver dos amarillas en apenas un minuto.
Sin embargo supo cómo meterse a los fans en el bolsillo después de la expulsión, al salir sonriéndole al banquillo azulgrana y en especial a Koeman.
Casemiro volvió locos a los culés tanto dentro como fuera del terreno de juego, algo que apreciaron en las redes muchos aficionados merengues.
Otro que le aplaudió esa actitud desafiante al brasileño fue su compañero Sergio Ramos desde la grada, levantándose para aplaudirle en ese momento.
